El año 2024 es un año para conectarnos con nuestro yo verdadero y auténtico. Este es el tema central en el que coinciden tres eventos cósmicos de gran magnitud que nos impulsan a acceder a nuestro poder y fuerzas internas. Es un llamado a iniciar nuevos proyectos, aventurarnos hacia lo desconocido y confiar en nuestras habilidades para superar cualquier obstáculo como una inspiración para abrazar la valentía y la determinación necesarias mientras exploramos nuestro máximo potencial, reconocemos nuestro deseo y actuamos en consecuencia.
Ya hablamos en el boletín de marzo (https://taocurativomexico.com/anio-del-dragon-de-madera-yang-2024/) sobre el Dragón de Madera, regente del año, que nos ofrece un gran momento para poner en acción el deseo más profundo de nuestro corazón. Es un año para las personas que quieren cambiar el mundo o dar grandes saltos en su destino personal.
En segundo término, experimentamos el eclipse total de Sol del 8 de abril, poderoso fenómeno que no se producía desde 1991 en México y que nos trajo valiosas lecciones:
- La importancia de la introspección
- El poder de la transformación
- La necesidad de soltar y dejar ir
En astrología, se cree que el eclipse solar representa la oscuridad del ego y la oportunidad de un renacimiento espiritual, marcando un periodo en el que podemos liberar viejas energías y patrones para dar paso a una nueva conciencia y perspectiva.
En la tradición china, los eclipses solares y lunares son vistos como eventos de gran importancia, asociados con augurios y presagios. Se cree que los eclipses pueden traer cambios significativos a nivel individual y colectivo.
Y en tercer lugar, por si fuera poco, el 20 de abril marca un hito astronómico: la conjunción entre Júpiter y Urano en el signo de Tauro. Esta es la alineación más significativa del 2024. El encuentro de Júpiter y Urano ocurre cada 12 a 14 años, pero el encuentro de Júpiter y Urano en el signo de Tauro es increíblemente raro. Tauro suele estar relacionado con nuestros sentimientos de autoestima, el dinero, la materia, los sentidos y el cuerpo.
Júpiter es el planeta de la expansión, la abundancia, las creencias y los nuevos horizontes, ya sean mentales o físicos. Urano es el planeta de la innovación, los cambios disruptivos y la tecnología, las causas humanitarias y los grupos. Tiene que ver con nuestra conexión con la verdad, la justicia. Cuando está en conjunción con Júpiter, este apoya una mayor activación de la influencia de Urano para ayudarnos a romper con creencias y formas de pensar que ya no nos sirven.
Es mucho la activación de nuevos paradigmas, nuevas formas de pensar, nuevas formas de ser. Urano es el planeta asociado con las energías y principio del cosmos que nos guían a romper y salir de formas de ser que no están en alineación con el cosmos, nos está guiando hacia una mayor conciencia, mayor claridad, más sentido de la verdad y la capacidad para activar y empezar a manifestar los nuevos paradigmas.
La unión de Júpiter y Urano también puede crear un elemento de sorpresa o inestabilidad. Es nuestra octava más elevada y nuestra conexión con la mente divina que nos apoya para ver a través de la ilusión y penetrar al corazón de las cosas, liberar lo que está en desequilibrio, lo que necesita ser limpiado. Algo puede sorprendernos o alterar nuestra forma de pensar sobre las cosas.
A nivel personal, podemos aprovechar esta energía para expandir nuestra mentalidad y crear una visión más abundante para nosotros y nuestras vidas. Si bien está alineación ocurre el 20 de Abril, sentiremos que se está construyendo ya en marzo y durante todo mayo.
Las fuerzas del año del Dragón, el eclipse solar del 8 de abril y la conjunción Júpiter-Urano del 20 de abril, poderosas en sí mismas, juntas constituyen una tremenda ola que nos empuja a cambiar, sí o sí. El cambio no es fácil, pero resistirnos solamente nos genera ansiedad. La clave es entregarse y confiar, fluir con lo que el universo nos presente, que promete ser mucho más luminoso.
En momentos así, es de gran ayuda contar con información que nos guíe en nuestro camino. Si bien la astrología china es geocéntrica y no se ocupa de los planetas, los cálculos chinos tradicionales de nuestra constitución elemental, según la Ley de los Cinco Elementos, nos brindan valiosa y útil información sobre cómo combinan nuestras energías con las fuerzas cósmicas, posibles desequilibrios y cómo armonizarlos, cómo aprovechar los elementos favorables y prevenir los desfavorables; cuándo actuar y cuándo esperar.
Nuestra tabla de análisis energético de los Cinco Elementos y órganos puede interpretarse como un perfil psicológico y una constitución médica de la persona, mostrando tendencias subyacentes, muchas de las cuales pueden modificarse con prácticas.
Y para culminar, estamos en período de Mercurio retrógrado hasta el 25 de abril, que, como ya sabemos, es tiempo de pausa, reflexión y revisión de planes. Por ende, el seminario/taller de Astrología ZiPing que daré a distancia y que estaba programado para iniciar el 18 de abril se pospone hasta nuevo aviso.
Que la confianza y la paz reinen en nuestros corazones.